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Ollas en resistencia-Ollas de Independencia
Todos y todas cocinando un país incluyente y democrático el 20 de julio de 2021.

Expedición Dignidad
-La comida al centro del pensamiento-

La Ollatón
La Ollatón
Toque plural, sazón popular


Huertas verticales

Cosechar
Producir de manera autónoma el alimento que una comunidad requiere, es parte de la propuesta que venimos realizando, pensar en el lugar donde se produce la comida que hemos de llevar a nuestra mesa y en quienes la producen, es lo que denominamos comida con rostro, saber que podemos hacer parte no solo de quienes cocinan sino también de quienes cultivan, volver a unir ese lazo comunicante ancestral del cosechador/a y el cocinero/a. Es por ello que llegar a la propuesta de huertas verticales para darle un giro a la Ollatón y pensar que en Esfuerzos de Paz 1 se produjera desde la base el alimento, era cuestión de tiempo, ya que en la búsqueda de generar autonomía por medio de la acción educativa en las comunidades donde trabajamos, reconocimos que era necesario transitar por otras construcciones que permitieran reafirmar el sentido de la colectividad y la confianza entre los habitantes de éste sector.
En un escenario donde la desposesión, el despojo, el desarraigo y las múltiples formas del desplazamiento hacen presencia, la huerta vertical se convierte en una posibilidad de ganar el suelo que no solo nos sirve para pararnos sino para sustentarnos y arraigarnos, es la materialización de nuestra habitabilidad en la tierra, un suelo hacedor de vida, y por ello saberlo cerca es una forma de anclaje para darle base a una comunidad que inicia su consolidación después de una errancia producida por el conflicto exacerbado, en las múltiples formas, de este país, y de sus profundas asimetrías.
La huerta vertical es la manera en que los sin tierra logran recuperar su posesión y colectivamente producir alimento para de forma solidaria intercambiar productos de acuerdo con la capacidad de regenerar tejido social. Es así como estas huertas se enraízan para generar resistencia a lógicas individuales y desde el cuidado producir alimento para traducirlo en soberanía como un sueño colectivo. Se convierte en un tótem donde se produce un enlace sagrado entre cosecheros y cocineros como propósito educativo para dar lugar a una simbiosis ancestral que le dé un lugar político al planteamiento del sujeto que se piensa la comida como un todo.
